El presidente de Islandia, Ólafur Ragnar Grímsson, ha solicitado a su ministro de Finanzas, Árni M. Mathiesen, que le sea rebajado el sueldo en un 15%, en línea con los recortes asumidos por otros funcionarios ante la severa crisis económica que atraviesa Islandia, que provocó la nacionalización de su sistema bancario y que mantiene al país al borde de la bancarrota. El sueldo del presidente de Islandia asciende a 1,8 millones de coronas islandesas al mes (10.515 euros).